Prevención y monitoreo de brucelosis y Aujesky en sistemas porcinos

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Prevención y monitoreo de brucelosis y Aujesky en sistemas porcinos

30 September 2014

ARGENTINA - Ambas enfermedades afectan la productividad de los sistemas de producción porcinos, además de que pueden comprometer la salud humana.

Según informó el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), dentro de las enfermedades de los porcinos, la brucelosis y la enfermedad de Aujesky se encuentran dentro de aquellas que afectan la productividad de los sistemas y pueden comprometer la salud humana.

Por ello, la Agencia de Extensión Rural Simoca del INTA Famaillá y el Instituto de Investigación Animal del Chaco Semiárido (INTA Leales) trabajan en el monitoreo, diagnóstico y prevención de brucelosis y enfermedad de Aujeszky (más conocida como pseudorrabia), que están bajo el programa de control y erradicación del SENASA.

El Médico Veterinario Alfredo Martín explica que “ambas enfermedades generan déficits productivos, ya que inducen abortos. La brucelosis es considerada una zoonosis, es decir, puede contagiarse al hombre. Sumado a esto, los tratamientos en los animales son poco exitosos y, en nuestro país, no existe una vacuna para la especie porcina. Mientras que la enfermedad de Ausjeszky puede llegar a producir mortalidad del 100% de lechones debido a signos nerviosos, además del costo que implica por el descarte de reproductores. En este caso tampoco hay una vacuna específica”, comentó el médico veterinario.

El humano se contagia de brucelosis, de origen bacteriano, a través del contacto con restos de abortos o placentas contaminadas del animal y con orina de cerdos enfermos o que padecieron la enfermedad; también en la atención del parto. Los síntomas en el hombre son poco específicos, presentando fiebre recurrente, dolores articulares (artritis crónicas) o musculares e, incluso, problemas en el sistema nervioso o respiratorio. La higiene y las pautas de bioseguridad como el uso de botas de goma y guantes, entre otras, son medidas básicas para evitar el contagio.

La enfermedad de Aujeszky, en cambio, es causada por un virus y afecta no sólo a los porcinos sino a especies domésticas como bovinos, ovinos, perros y gatos.

En todos los casos es de resolución mortal, excepto en el cerdo que es el único capaz de sobrevivir a la infección por ser su huésped natural. Si bien el hombre no se contagia, sufre pérdidas económicas porque la presencia del virus afecta la producción por fallas reproductivas, muerte de lechones y disminución de la ganancia de peso.

En referencia al trabajo que realiza el INTA en esta temática, la Ing. Zoot. Ruth Macedo señala que “para tener un diagnóstico sobre el estado sanitario en los sistemas de pequeños productores familiares realizamos un muestreo de sangrado. El material obtenido fue enviado al INTA Marco Juárez (Córdoba) para el análisis correspondiente y el resultado fue negativo. Esta información sirve como indicador de nuestro trabajo con los productores; además, para ellos, es un gran incentivo para seguir trabajando con manejo y normas higiénico-sanitarias”.

Es importante tener en cuenta que los productores pueden realizar el análisis de brucelosis en Tucumán, a través del laboratorio del Labrydea de la Facultad de Agronomía y Zootecnia de la Universidad Nacional de Tucumán.

Los técnicos del INTA destacan que la prevención es la mejor estrategia para evitar el ingreso de estas enfermedades en los criaderos.

Por eso, recomiendan: adquirir reproductores que provengan de predios libres de ambas enfermedades, condición obligatoria para los que venden genética; no intercambiar padrillos con otros productores; realizar una buena cuarentena antes de introducir animales nuevos en el predio; evitar el ingreso fortuito de otros animales con un buen cerco perimetral; eliminar inmediatamente los restos de abortos o placentas (quemar y enterrar con cal), usando siempre guantes como protección personal.

Estas acciones se desarrollan en el marco del Proyecto Regional con Enfoque Territorial Tucumán Sur en el caso del INTA Famaillá; y dentro del Proyecto Específico Enfermedades que afectan a los Sistemas de Producción Porcina en el INTA Leales.